La quiebra de Grecia o la crónica de una muerte anunciada

Protestas ciudadanas en Grecia

Otra vez Grecia, ¡qué aburrimiento! Llevamos días con lo mismo: el riesgo de quiebra, la posible salida del euro, la negativa clasificación de las agencias de rating, las exigencias de la heil-Merkel y del BCE, el nuevo sablazo al pueblo griego, los absurdos proclamas de la pareja de hecho del momento Sarkozy Merkel, las palabras de Trichet para tranquilizar los mercados, etc. etc. etc.

Frente al desastre económico de Grecia provocado a conciencia por la élite del Nuevo Orden Mundial estamos asistiendo a un penoso bailoteo de declaraciones, contradeclaraciones, opiniones de políticos y analistas económicos cada una de ellas con la intención de no crear el pánico en los mercados y en la gente. Es un espectáculo francamente lamentable.

En la red, muchos de los que seguimos esta patética representación y que no somos grandes mentes del periodismo ni influyentes payasos de la política llevamos tiempo repitiendo lo mismo: lo de Grecia es la crónica de una muerte anunciada.

Nuestros análisis quizás no se basan en conocimientos teóricos de economía ni aplicamos algoritmos crípticos pero nuestra voz es más auténtica y sincera porque habla desde la libertad. No tenemos que aplacar los mercados ni convencer a nuestros votantes que somos lo mejor para que nos sigan votando. No somos dueños de bancos ni especuladores que están ganando fortunas sobre la piel de millones de personas. Somos individuos que pensamos libremente y que libremente hablamos.

La quiebra de Grecia es solo cuestión de tiempo, digan lo que digan la heil Merkel o Trichet o quien sea. La élite del Nuevo Orden Mundial lo ha planificado desde hace tiempo; esta oligarquía del dinero mueve los hilos para cumplir con su plan perverso de control del mundo y de sus habitantes. A mí personalmente no me interesa si son los Illuminati o los Oscurati porque esto no cambia el resultado final de sus acciones. De hecho creo que las fabulosas teorías de extraños complots solo ayudan su plan porque distraen de lo que está pasando en lo cotidiano.

Prefiero por ejemplo quedarme con el hecho que, mientras la clase media se está empobreciendo a un ritmo vertiginoso, en cambio las pocas fortunas millonarias son más millonarias aún. Prefiero reflexionar sobre el hecho que, mientras el mercado inmobiliario se desploma, las ventas de los inmuebles de lujo aumentan sin que dichos inmuebles hayan bajado de precio. Prefiero recordar que, mientras en Grecia y en el resto de Europa por la crisis se aprueban recortes que gravan sobre la gente de a pie, políticos, managers, banqueros, multinacionales de todo el mundo, se están llenando los bolsillos con la crisis. Esto está ocurriendo, la élite se engorda mientras la gente pasa cada día más necesidad.

No hay duda alguna que los acontecimientos griegos sean la crónica de una muerte anunciada. La lenta agonía del país helénico sirve solo para un propósito. Los bancos alemanes y franceses detienen grandes cantidades de deuda griega y han de poner remedio a esta situación. Para hacerlo necesitan tiempo y entonces los demás poderes amigos ¿qué hacen? Como se dice en todos los medios de comunicación, estos poderes amigos de los bancos inyectan literalmente oxigeno. Es como cuando se quiere mantener en vida a un moribundo que no puede respirar por sí mismo: se les da oxigeno. De esta manera la élite protege a sus propios afiliados y de paso gana montones de dinero ya que la élite conoce de antemano toda medida que tendrá repercusión en los mercados ya que estas medidas las dictan sus miembros.

La lógica diría que Grecia denunciara los responsables de su situación, que los procesara, que apelara a la cancelación de la deuda contraída por los especuladores, que saliera del euro y con su propia moneda remontara. Podría hacerlo, pero esto no le interesa a la élite y como la élite manda, pues Grecia va a morir.

Lo sabemos todos: Grecia va a morir y detrás de ellas morirán otros países. La élite lo ha decidido para poder controlar Europa. Japón tiene una deuda del 220% y está en recesión desde hace dos años, ¿por qué nadie lo ataca? Porque ahora es el turno de Europa.

Grecia es la crónica de una muerte anunciada.

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