El Nuevo Orden Mundial se apodera de Grecia

La policia contra el pueblo

Estos días se está desvelando el real significado de la crisis griega y del rescate financiero por parte de la troika UE, FMI, BCE.

Los acontecimientos de Grecia son un primer y directo ataque a las soberanías nacionales por parte de los arquitectos del nuevo orden mundial. La conquista de Grecia marca el comienzo de la conquista de Europa. La finalidad última de esta oscura oligarquía que quiere hacerse con el control del mundo y de su gente es la creación de un gobierno mundial y una banca mundial que dirijan el planeta. La globalización que uniforma y elimina las diversidades es una de sus armas.

En los periódicos podemos leer lo que ya se veía venir cuando empezaron los problemas del país helénico; como condición al segundo rescate financiero Grecia acepta que un indefinido grupo de supervisores controlen de cerca las privatizaciones y las reformas del gobierno. Un eufemismo para decir que Grecia ha de ceder parte de la soberanía democrática a unos brumosos personajes que se esconden detrás de organismos como la UE, el FMI o el BCE. Los políticos helenos no podrán decidir qué hacer y cómo hacerlo para salir de la crisis sino que tendrán que acatar en silencio las directrices que llegan desde fuera. En la crisis griega estamos viendo un ataque directo a la democracia y a la soberanía del pueblo.

La oligarquía neoliberal ha elegido el país helénico para su ataque básicamente por dos razones. En primer lugar Grecia es una nación relativamente pequeña, lo que garantiza que las cosas no se le escapen de las manos; en segundo lugar es la cuna de la filosofía y de la democracia en Europa. Para la mano negra que orquestra este sucio plan derrocar primero el país donde nació la democracia, es decir el poder del pueblo, no es solo un hecho simbólico, sino la afirmación clara e inequívoca de sus intenciones liberticidas. Esta oligarquía quiere derrotar la democracia, quiere esclavizar los pueblos.

Para conseguir sus objetivos no escatiman medios y sutilezas, sobre todo considerando que Europa no es una plaza fácil en la cual torear; lo dijo en su tiempo la neoliberal Margareth Thatcher al afirmar que en el Reino Unido no sería simple imponer los criterios de la nueva economía de mercado debido a la tradición democrática del país. Sin embargo lo consiguió a pesar de los graves desordenes sociales que se generaron en aquellos años.

De momento Europa no es Suramérica, donde las dictaduras militares impusieron los mandatos de la nueva economía con la fuerza, las armas y la represión policial. En Europa hay que actuar de otra forma. Para que la gente acepte voluntariamente la esclavitud oligárquica hay que derrotar los estados desde su interior. Hay que desestabilizar fuertemente las soberanías locales, las economías para que acepten la salvación que viene desde fuera, llámese UE, FMI, BCE, Merkel, Sarkozy o bancos varios. Francia y Alemania son los principales acreedores de Grecia que gasta un 4,5% de su PIB en renovar armamentos para el ejército. Una de las excusas es su problemática posición fronteriza con Turquía, que al estar en la OTAN realmente no es ninguna amenaza. Es un gasto innecesario, sin embargo nadie le ha exigido a Grecia que rebaje drásticamente su gasto militar. ¿Por qué? ¿Qué intereses hay detrás? ¿Quién vende armas a Grecia? ¿Quién le sigue concediendo créditos para comprar armas en un momento en que su déficit es el 10,5% de su PIB? Francia y Alemania, las mismas que están a la cabeza del rescate financiero. Suena por lo menos retorcido, pero se ve absolutamente lógico si en realidad se persigue mantener a Grecia en una situación de crisis permanente para conseguir desestabilizar el país y hacerse con el control.

La polizia durante los enfrentamientos de Atenas

En Europa el neoliberalismo no puede provocar un golpe de estado violento para controlar las economías locales como ocurrió en Chile con Pinochet por ejemplo; ha de hilar fino y obligar a que la reestructuración ocurra desde dentro de las instituciones democráticas, provocando cambios políticos aparentemente legales, dictados por emergencias momentáneas y aceptados por la mayoría de la población como única solución frente al desastre financiero.

Grecia es el ensayo general, un primer ataque, pero pronto la mano negra extenderá su codicia sobre todos los estados que desafortunadamente para sus ciudadanos forman parte del euro. Los gobiernos locales se verán obligados a ceder su soberanía a indefinidos poderes globales para no declarar la bancarrota, los mismos indefinidos poderes globales que son los responsables de la bancarrota. No es política ficción; está ocurriendo muy cerca de nosotros, en un país miembro de la UE.

El nuevo orden mundial en el cual los mercados van a mandar por encima de las ideologías está ganando el asalto porque cuenta con la complicidad de todo el entramado de poder, desde la política, por supuesto, hasta los jueces, las fuerzas del orden o los medios de comunicación. Es más: los políticos, los jueces, las policías, los medios de comunicación están controlados por la oligarquía del nuevo orden mundial.

Toda esta gente no tiene el más mínimo escrúpulo en pisar a millones de personas con tal de lograr sus objetivos. Grecia otra vez nos lo demuestra. Las protestas de la calle se hacen cada vez más fuertes, pero ¿alguien está escuchando al pueblo? Los políticos títeres, siguen adelante con las reformas, con las subidas de impuestos, con los recortes que sangran a la mayoría para beneficio de una exigua minoría.

A estas alturas y considerando lo que está en juego, es decir el control del mundo y de su gente, no creo que las protestas callejeras consigan parar este grupo de desalmados que únicamente buscan su provecho. Esta oligarquía no tiene orgullo nacional, ni se considera de uno u otro país. Se ponen por encima de las tradiciones ancestrales; no tienen ninguna vinculación con una tierra concreta. De hecho no tienen vinculación con la Tierra; no son humanos porque han perdido toda humanidad. Para ellos los pueblos son una masa informe que quieren controlar, dirigir y manipular. Desprecian las libertades individuales y grupales y quieren imponer sus criterios. No creo que las protestas pacíficas, ni los discursos éticos los paren porque no conocen el pacifismo ni poseen ética alguna. Estos inhumanos se ríen del pacifismo y el asamblearismo, porque en el fondo saben que son una pérdida de tiempo.

Mientras la gente protesta pacíficamente y se reúne en eternas asambleas para no consensuar nada contundente el nuevo orden mundial se afianza en Europa. La gente protesta contra los recortes, pero los recortes se llevan a cabo. La gente protesta contra la austeridad, pero la UE impone austeridad. La gente protesta contra el pacto del euro, pero el pacto del euro es firmado. La gente protesta contra los políticos, pero ningún político dimite o es procesado.

Nadie está respondiendo a las protestas pacíficas. Grecia es el ejemplo de ello. Grecia es el ejemplo y después de Grecia le tocará a España o a Italia o a Francia o a quien sea. Golpear a España significará experimentar con un país más grande, con más habitantes y con más repercusiones posibles. Además servirá para dar un claro mensaje a los pueblos que protestan: protesta y te golpearemos, algo que por cierto la policía ya ha hecho en Barcelona durante las manifestaciones de los indignados.
A Alemania se le ha visto el plumero con el asunto de los pepinos españoles cuando sin pruebas y de forma indiscriminada han culpado a los agricultores andaluces del brote de e-choli. ¿Por qué no eligieron otro país como chivo expiatorio? Porque ya tienen en la agenda hundir a España, aunque actuaron antes de tiempo en este caso.

España será intervenida entre finales de 2012 y comienzos de 2013 cuando el gobierno de la nación haya cambiado del PSOE al PP y los nuevos políticos, lacayos del neoliberalismo, descubran públicamente que las cuentas habían sido maquilladas, que el sistema financiero/bancario no era tan sólido como decían o algún truco por el estilo. Buscarán un golpe de efecto que emocionalmente aturda a la población y justifique medidas represoras. Esto les dará vía libre para pedir más sacrificios a la gente culpando además la mala gestión de los gobiernos anteriores.

La conquista de Grecia ha marcado el comienzo de la conquista de Europa.

El nuevo orden mundial no va a renunciar a sus planes de conquista global por mucha protesta pacífica.
Solo es el comienzo.