¿Perteneces a la clase media? Entonces eres de aquellos que con un sueldo digno y la ayuda de créditos e hipotecas había alcanzado un desahogado bienestar. Seguro que te dabas algún que otro lujo, sin exagerar pero con gusto. Tienes tus ahorrillos, pones cada mes un dinero en el fondo de pensión que desgrava, tus hijos van a un colegio privado, has contratado una póliza sanitaria.
Familia de clase media, prepárate a morir. De hecho ya estás muriendo; agonizas sacrificada por los santos a los cuales miras con devoción y que te empeñas a adorar. Tus santos, la clase alta, los lobby de poder, los peces gordos no solo no te van a salvar de la desaparición sino que te van a exprimir hasta dejarte en calzoncillos. Los peces medianos comen a los pequeños, pero los peces gordos se comen a los pequeños y a los medianos también; ahora que los pequeñines escasean son su plato favorito. ¿Qué creías, o sea qué creías?
Llamaste perroflautas a cuantos salieron a manifestarse. Dijiste que eran vagos que había que aporrear o enviar a trabajar. Estoy de acuerdo contigo que podrían quitarse esas antiestéticas rastas y vestirse mejor. Aquellos que van con 20 perros al séquito deberían lavarse, por no hablar de cuantos fuman porros o se drogan. Entiendo que te den escalofríos y que su libertad te asuste; son anticlericales, anarquistas y un pelín guarros, pero ellos saben cómo sobrevivir. Si no tienen dinero se las ingenian y lo encuentran. En cambio tu osea de clase media ¿qué vas a hacer? No te pondrás ciertamente a hacer malabares en la calle. ¿Vas a pedir ayuda a la iglesia, aquella iglesia connivente con los peces gordos?
Claro, olvidaba que antes que eso puedes renunciar a la casa de la playa, al segundo coche, a las vacaciones exóticas. Tus hijos pueden dejar la escuela pija, aunque eso ya te hace temblar, ¿verdad? Mejor vender las joyas de la abuela antes y las tuyas que total nadie se va a enterar, porque al fin y al cabo es importante mantener la fachada.
Genial, tienes tus recursos, pero lo que te está ocurriendo se llama agonía y tras la agonía viene la muerte. Los santos de tu devoción no se van a parar en su labor, ellos quieren más y más y más. Como a los trabajadores obreros ya les han quitado casi todo, ahora van a por ti osea de clase media. Te suben el IRPF, el IBI, el IVA, la gasolina, el seguro médico, la cuota del colegio, las tasas universitarias, la póliza médica y como tu abuela no te haya dejado un vagón lleno de joyas, mejor que te apuntes a clases de malabares. O eso o quizás entiendes que es hora de reaccionar porque te están matando. Los peces gordos que tanto admiras te están matando.
¿Qué dices? Es de perroflautas manifestarse y a ti no te va a comer nadie. Esto pronto se acabará y volverás a tener tu estatus. Soy un exagerado y tú tienes tus recursos. Siempre puedes pedir ayuda a tus amigos del club.
Lo que te digo, clase media. Sigue así, acomodado en tu piso confortable. Estás sentenciada clase media. Vas a morir. No digas que no te avisaron
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